Mientras
uno se mata capacitándose y estudiando para emitir opiniones responsables y
valederas que contribuyan en algo al desarrollo de la región, a los consejeros
regionales y en general a casi todos los políticos le importa un rábano las
sugerencias de la prensa, las críticas de la población o cualquier reacción por
sus vergonzosas actuaciones.
Digo esto
con conocimiento de causa, y ellos, también ellas, lo saben muy bien; para
explicarles mejor solo les voy a contar lo sucedido en la sesión anterior del
viernes 25 de agosto, donde aparentemente todo estaba listo para la vacancia de
Waldo Ríos Salcedo.
Cuando
me acercaba al interior del pleno, un consejero se me acercó y agarrándome la
cabecita me dijo “por la h… ha venido la prensa, si hoy, ni mañana lo van a vacar a Waldo”,
entonces comprendí que la consigna de los consejeros regionales era proteger al
actual inquilino Luis Gamarra, dilatando o rechazando la vacancia del gran
waldoncho.
Pero lo
que más me llamó la atención, fue el cambio radical de algunos consejeros
comodines, que se arriman a cualquier autoridad de turno, esos que antes habían
promovido la suspensión de Enrique Vargas, sin respetar el debido proceso,
ahora exigían lo contrario. ¿cuáles son sus intereses?, obviamente el poder para
el negociazo.
Ingresaron
a un supuesto cuarto intermedio para buscar un consenso y acuerdo saludable
para la región, en realidad no fue nada de eso, más bien la comprobación de que
los consejeros dicen una cosa cuando hay prensa y actúan diferente cuando no están
vigilados por los medios de comunicación.
Eso pude
escuchar cuando abrieron la puerta nuevamente del consejo y dos consejeros discutían
lo que les estoy contando, no se dieron cuenta que ya estaba adentro, uno de
ellos al percatarse intento cambiar de tema, pero, ya había escuchado la mayor
parte de sus charlas satánicas.
Como verán
amigos, esos son, sí, esos que lamentablemente fueron elegidos por su población,
no sé cómo, pero ahí están haciéndola linda, jugando su mejor partido para
juntar money para la próxima campaña; porque la mayoría se perfila como
candidato municipal de sus respectivas provincias.
Y no sería
nada raro que estos salgan elegidos nuevas autoridades en las próximas
elecciones, porque a la población nuestra, les gusta elegir a los corruptos, vagos,
mentirosos y todos los que reúnan esos requisitos, les gusta el masoquismo.
¿Qué podemos hacer para no caer en lo
mismo de siempre?